Sunday, January 14, 2018

Dios nos prepara cuidadosamente

Sermón por La Rev'da. Marcía McRae
La Parochia Episcopal de San Francisco, Goldsboro, NC, 14 enero 2018
Año B, Epifanía 2: 1 Samuel 3:1–10-20; Salmo 139:1–5, 12–17; 1 Corintios 6:12–20; San Juan 1:43–51

<<Ven y compruébalo>> dice Felipe a Natanael.

Como Felipe, nosotros debemos invitar a nuestros hermanos y nuestras hermanas en la familia humana:
<<Ven y compruébalo>>.

Venimos aquí y vemos unos a otros, y recebimos los dones de Dios – sus palabras y sacramentos. A veces, el amor y el mensaje de Dios son claros. Otras veces, son como oímos en nuestro Salmo: “¡Cuán profundos me son, oh Dios, tus pensamientos ¡Cuán inmensa es la suma de ellos!”

Este verso refleja ideas que oímos en las otras escrituras de hoy. Nuestro Salmo nos dice:
“Porque tú creaste mis entrañas;
me tejiste en el vientre de mi madre.
Te daré gracias, porque maravillosamente he sido formado;
admirables son tus obras, y bien lo sé.”

¿Cómo parece a Uds. ver a Dios tejar, y a oír la idea de que Dios prepara cuidadosamente, construye poco a poco para formar, para crear algo precioso?

¡Cuidasosamente Dios te construyó!
¡Que grande es el amor que Dios tiene
por ti!

¡Por ti!

El amor de Dios para nosotros, para cada uno de Uds. es más que podemos entender y comprender. Es un don.

Nuestro Salmo nos dice que Dios nos ve en las más oscuras partes de nuestras vidas. La oscuridad del vientre de la madre que sostiene la vida nos da la seguridad de que la compasión de Dios continua en amor y sabiduria1 sin importar nuestra capacidad de comprenderlo.

Porque somos hermanos y hermanas de Jesucristo, Uds. y yo sabemos que la providencia de Dios y su sabiduría que forma sus planes para nuestras vidas son partes integrales de nuestras vidas, y que Dios sabe todo de nosotros – todo de cada persona aquí presente.
Además, aunque El Señor sabe todo de nosotros, ¡El nos ama!

¡El nos ama!

Durante los tiempos mas oscuros de nuestras vidas y las partes de confusión profunda, cuando no sabemos ni entendemos nada, Dios nos ama. Dios te ama.

Sabemos que Dios nos ama porque para nosotros – para ti – Jesús murió en la cruz, resusitó, y por el Espíritu Santo, quien nos guía, conocemos este amor grandioso. Este amor del Espíritu Santo nos teje para que seamos el Cuerpo de Cristo aquí.

El tiempo y el clima nos encierra de vez en cuando [como la semana pasada y mañana], y nos separa unos de otros, y parece que nos une a otros seres queridos ¡porque no podremos salir de nuestras casas en el hielo y la nieve!

El tiempo y el clima puede encerrarnos en oscuridad confudiéndonos haciéndolo difícil ver bien y con claridad y sabiduría.

San Pablo ayada a los Corintinos a ver con mas claridad como vivir en su nueva vida en Jesucristo en hacer cambios positivos en sus vidas.

Tejidos en el amor de Dios, ellos viven en un lugar de muchas actividades, con dos puertos para barcas/naves, y templos para casi doce dioses y diosas, unos que incluyen los servicios de prostitutas del templo, quienes usan las facilidades públicas para bañarse – facilidades al lado de la sinagoga ¡a donde Pablo habla a la gente!2

Estos detalles nos da luz para comprender las dificultades para los Cristianos Corintios, quiens recibieron la carta de Pablo.

Vemos dificultades en la situación para Samuel, en nuestra primera lectura. Él aun no conoce a Dios. Este tiempo en la vida del Pueblo de Dios es un tiempo oscuro: profesía y visiones son raras. El sacerdote Elí, casi ciego, de veras no puede ver, y es la noche.3 Samuel se queda cerca de la luz del santuario de Dios.

Oimos reacciones confundidas de Samuel y Elí cuando Dios le llama a Samuel, quien piensa que Elí le llama. Despasio, Elí sabe que es Dios que llama a Samuel.

Su entendamiento despacio de Elí nos demuestra que en una situación nueva, nuestra experiencia no nos asegura que vamos a comprender inmediatamente.

Vemos como los discípulos respondan cuando Jesús les llama. Antes de este, dos dicípulos de Juan Bautista ven a Jesús y le sigan. Uno de ellos es Andrés.

Jesús les pregunta que buscan, y ellos preguntan a donde se queda.
Jesús les dice: <<Ven y compruébanlo.>>

Ellos lo hacen. Andrés repite esta invitación a Natanael hoy.

Estar con Jesús, podemos entender quien es. Y facilitar a encuentro con Jesús de nuestros hermanos y hermanas en la familia humana es un don y una responsabilidad que tenemos que hacer.

¿Cómo encontramos a Jesús?

¿Cómo seremos la manera para que alguien se incorpore al cuerpo de Cristo?

A esta sacrada mesa:

<<Ven y compruébanlo.>>


Bibliografía
Boadt, Lawrence. Reading the Old Testament: An Introduction. New York: Paulist Press. 1984.
Dios Habla Hoy: La Biblia. 2da Ed. Nueva York: Sociedad Bíblica Americana. 1983.
Harper’s Bible Commentary. General Ed.: James. L. Mays. San Francisco: Harper & Row Publishers, 1988.
Harper’s Bible Dictionary. General Ed.: Paul J. Achtemeier. San Francisco: Harper & Row Publishers. 1985.
Holy Bible with the Apocrypha. New Revised Standard Version. New York: Oxford University Press. 1989.
Jewish Study Bible: Jewish Publication Society TANAKH Translation. New York: Oxford University Press. 2004.
The New American Bible for Catholics. South Bend: Greenlawn Press. 1986.
Tenney, Merrill C. Handy Dictionary of the Bible. Grand Rapids: Zondervan Publishing House. 1965.
Winner, The Rev. Dr. Lauren. Diocese of GA Spring Clergy Conference. Honey Creek, GA. May 4-6, 2014. and https://divinity.duke.edu/faculty/lauren-winner Accessed: 13 Jan, 2018.

1 Idea de Harper’s Bible Commentary. Pg. 491.
2 Información personal en Corintino & de recursos que incluyo aquí.
3 Jewish Study Bible. Pg. 567.

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